En una tradición que convoca a cientos de fieles cada 14 de mes, el Templo Recoleta Franciscana fue nuevamente escenario de una misa especial por la pronta beatificación de Fray Andresito, Venerable franciscano conocido por su entrega y solidaridad hacia los más pobres y abandonados. Este mes de diciembre, la eucaristía adquirió un carácter especial al enmarcarse en el espíritu de la Navidad, tiempo de esperanza y amor fraterno.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
El Templo Recoleta Franciscana se llenó de devotos que acudieron no solo a rezar por la beatificación del Venerable, sino también a depositar sus intenciones personales. Estas oraciones, que abarcan desde la mejoría en la salud hasta la búsqueda de trabajo y la resolución de problemas familiares, reflejan la confianza que los fieles tienen en la intercesión de Fray Andresito ante Dios.
Un espacio de fe y esperanza personal
La misa, presidida por el hermano Nicolás Alfaro, ofm, Guardián del Templo, destacó la figura de Fray Andresito como un modelo de caridad cristiana y un intercesor cercano para quienes buscan alivio espiritual. En su homilía, subrayó: “Llegamos a la casa de Fray Andresito en este tiempo de Adviento, tiempo que está cargado de la profundidad que significa para los cristianos este tiempo de preparación. Nos estamos preparando para celebrar, para rememorar la primera venida de Jesús en el vientre de María”, recordó.
“Por medio de la fe, reconocemos a este hombre verdadero que tuvo una sola misión que es mostrarnos el rostro del Padre y que nos anima a que levantemos nuestra mirada y nos demos cuenta de que nuestro destino no está aquí, sino que comienza aquí, pero que aspira a la casa del Padre”, animó el hermano Nicolás Alfaro, ofm.
En esa línea, el hermano Nicolás, prosiguió. “Lo mismo hizo Fray Andresito. Conoció al Señor cuando salió al paso de su vida, como un Dios vivo, activo en su vida. Quiso hacer trascendencia con Jesús en medio de su historia, en medio de los pobres”.
De cara a la Navidad, el Guardián del Templo, exhortó al cierre de su homilía. “Cuál es el regalo que brotará en nuestro corazón en Navidad. Miremos nuestro pesebre que es donde allí quiere nacer Jesús en nosotros. Quiere nacer en esa realidad de pecado, de enfermedad, de sin sentido. Quiere nacer también en esos buenos deseos que habita en cada uno de nosotros. En esta Navidad, abramos nuestra puerta Jesús”.
De la mano del Venerable
Como es tradición, al término de la celebración, los asistentes se dirigieron a la tumba donde descansan los restos del Fray Andresito. Allí, con profunda devoción, recitaron la oración por su beatificación y dejaron sus intenciones personales.
La señora Olga Ramírez de la comuna de Quinta Normal quedó muy emocionada por dos aspectos de esta misa. En primer lugar, por la gran cantidad de personas y segundo por las palabras sobre Navidad. “Me voy muy emocionada y contenta con esta misa, porque veo que Fray Andresito cumple en mi ese deseo de Navidad y de poder estar en familia. Le pido a él y a Dios que nos dé una buena Navidad a todos”.
Don Juan Castillo, de la comuna de Conchalí, por su parte, expresó también su gratitud por este día. “Fue todo muy bonito. La misa, las palabras del padre. Le pido a Dios y a Fray Andresito que nos ayude a pasar una bonita Navidad a todos nosotros y especialmente a los que están sufriendo”, clamó.
Al final de la misa, el hermano Nicolás Alfaro, ofm, recordó que la Misa de Nochebuena será el martes 24 de diciembre a las 19:00 horas.
