
La primera eucaristía de este martes 14 de noviembre al mediodía fue presidida por el Hermano Nicolás Alfaro, ofm, Guardián del Templo Recoleta Franciscana, ocasión que también sirvió para bendecir la remodelada Capilla del Santísimo.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Como es habitual, cada 14 de mes, la Orden Franciscana reza por la pronta beatificación de Fray Andresito y en la misa de mediodía, el Hermano Nicolás Alfaro, ofm, recordó la importancia de ser testigos y anunciadores de Cristo, a imagen del Venerable.
Así, en su homilía, señaló que todo el mensaje que Jesús nos dejó está siempre orientado “para que nosotros nos encaminemos al Reino, es decir, a la plenitud de nuestro destino creatural. Por eso nosotros estamos invitados a tener conciencia a comenzar a construir el reino por medio del mensaje Salvador de Jesús aquí y ahora”.
En esa línea, recordó, además, que, por medio del pecado, también se produce una herida en nuestra relación con Dios. “El ser humano constantemente tiene que hacer camino de reconciliación, de apertura a Dios, de reconocimiento, no sólo del intelecto, sino también de nuestro corazón”.
Ante ello, agregó. “Cada uno de nosotros somos misioneros del Evangelio y hoy necesitamos que esa buena noticia llegue a corazones de muchos, porque penosamente en el mundo hay guerras, violencia, oscuridad y Jesús es todo lo contrario, es luz, es vida, es presencia, es amor desbordante”, aclaró.
Por último, el Hermano Nicolás Alfaro, ofm, Guardián del Templo Recoleta Franciscana, exhortó. “Fray Andresito es un amigo que nos conduce a Dios, porque lo único extraordinario de él fue salir de sí mismo y de su orgullo, cedió sus propias complacencias, cedió en el alimento, en la instrucción hacia los pobres, perdiéndose, asimismo, pero ganando la vida eterna, la vida que nadie nos puede quitar, la vida que nadie nos puede arrebatar”.
“Pidámosle a Dios todos los días la gracia de ser testigos, de ser servidores en el mundo al igual como lo fue Fray Andresito”, concluyó el Hermano Nicolás.
Bendición nueva capilla del Santísimo
Al final de la misa, se realizó una procesión con el Santísimo que, en primer lugar, llegó hasta la tumba de Fray Andresito, momento en que se rezó- como es habitual- por su pronta beatificación y posteriormente, todos los asistentes se dirigieron hasta la Capilla del Santísimo, la cual fue remodelada gracias al aporte de bienhechores y que fue bendecida por Hermano Nicolás Alfaro, ofm, Guardián del Templo Recoleta Franciscana.