El sábado 17 de diciembre, en la localidad de Cerro Negro en Angol y ad-portas de la Navidad y como un momento propicio para preparar el corazón a las celebraciones, se llevó a cabo una jornada con siete comunidades rurales, donde participaron un total de 150 personas.
Cabe precisar que la actividad de la parroquia San Buenaventura de Angol, se desarrolló por medio de diversos trabajos en diferentes temas contingentes, una eucaristía, almuerzo, once, donde todo culminó con un plenario lleno de fraternidad.
El tema dado por Hermano Carlos Pérez, ofm, fue “La unidad de la Iglesia en camino de Sinodalidad», además de impartir a las personas mayores el sacramento de la Unción de los enfermos. En tanto, el segundo tema abordado fue entregado por Nolberto Castillo y trató sobre “Los Sacramentos en la Iglesia Católica».
En esa línea, se desarrolló un trabajo de un plenario por capillas, el que será analizado posteriormente por una Comisión respectiva que recopilará todas las ideas recogidas. Asimismo, al inicio de la jornada, se hizo entrega como un signo de unidad y de Iglesia en Misión, un Cristo de San Damián, el cual irá peregrinando cada año en todas las comunidades de Angol. Mientras que al final del encuentro, se hizo entrega a cada uno de los representantes de las comunidades un Pergamino que fue bendecido por el Hermano Carlos.
El Hermano Carlos Pérez, ofm, señaló sobre la jornada, que el encuentro “fue tomando las características propias a una Iglesia en misión, es decir, fraterna y con un acento Franciscano en Sinodalidad. Todos quedaron muy contentos por el objetivo del encuentro con el Señor Jesús”, valoró.
Respecto de su trabajo como Vicario Parroquial, el cual asumió este año, el Hermano Carlos Pérez, ofm, analiza que su idea principal fue poder darle un carisma a la parroquia, “para que sea más fraterna, servicial y evangelizadora. Posteriormente, y en conjunto con el Consejo Pastoral, hemos logrado grandes avances pastorales, los que han ayudado a los feligreses a tomar conciencia que la parroquia es una segunda familia en el cual todos tienen protagonismo. Ahora se puede trabajar más en conjunto y en comunión sabiendo que Cristo es nuestro centro”, precisó.
El valor de reencontrarse
Nelson Ormeño Leal, Encargado de la Pastoral Rural de la parroquia San Buenaventura de Angol, también valoró el encuentro del pasado sábado 17 de diciembre, aunque no dejó de destacar jornadas anteriores con similar número de participantes. “Nos reunimos siete comunidades de nueve. Fue de mucho aprendizaje y también para que las comunidades tengan una preparación en la parte sacramental que les hacía falta. Tuve la oportunidad de conversar con todos los encargados de cada una de las comunidades y ellos agradecieron el poder seguir trabajando con entusiasmo y con el valor cristiano que se necesita”.
Por último, Ormeño Leal manifestó su alegría por ser el primer encuentro post pandemia. “Le doy gracias a Dios por el encuentro, el que se pudo cumplir con todo lo propuesto a pesar de algunos detalles que siempre pasan. Fue una tarde amena, de entretención, formación y el plenario. Son hermanos que están muy alejados y a pesar de eso, llegaron y estuvieron ahí. Solo me queda darle gracias a Dios por eso”.
Mirando el 2023
Sobre lo que viene de cara a la Navidad y cierre de año, el 27 de diciembre se entregará la parroquia «Nuestra Señora de Lourdes» de Temuco al Clero Diocesano, templo donde numerosos hermanos Franciscanos hicieron un valioso camino de evangelización y fraternidad. Para el 28 por su parte, los feligreses de San Buenaventura de Angol darán la bienvenida a los Hermanos Mario Márquez, ofm y Juan de Dios Hernández, ofm, provenientes desde la Fraternidad de Temuco, lugar donde se deja contar con la presencia Franciscana.