En la misa del mediodía del pasado martes 14 de diciembre, monseñor Julio Larrondo, Obispo Auxiliar de Santiago, recordó la figura y legado de Fray Andresito, por lo que animó a todos a seguir firmes en la oración por una pronta beatificación del Venerable. Además, exhortó a ser sinceros ante el llamado de Dios en nuestras vidas.
Monseñor Julio Larrondo en su homilía, puso énfasis, a la luz del Evangelio, en que Dios nos llama a todos a trabajar en su viña. “El Señor no hace distinción de las personas, si somos mayores o menores, si acaso eres más dotado o no, sino que invita a todos a trabajar a su viña”.
Luego, el obispo, precisó que este llamado es también una invitación para que todos nosotros podamos en medio de nuestras dificultades, ser trabajadores de su viña. “También, aunque muchas veces no se nos puede hacer difícil y nos puede costar el tener que trabajar hoy la viña del Señor, estar siempre ahí y poder también confiar en que el Señor es el Padre y que eso al final, nos ayudará a todos, nos hará crecer y nos regalará muchos dones”, rescató.
A lo anterior agregó. “Es decir, no solamente trabajar en la Iglesia, sino que en el mundo y dar testimonio y hacer crecer el Reino de Dios en este tiempo que nos toca vivir”. Asimismo, el obispo invitó a todos a aceptar con transparencia el llamado de Dios.
El Obispo Auxiliar de Santiago, destacó la fidelidad del Pueblo de Dios hacia Fray Andresito y llamó a no decaer en la oración hacia el Venerable. “Me llamó la atención que la Iglesia estuviera con mucha gente. La siguió con mucha devoción y una vez terminada la misa, muchos se acercaron hacia donde está su tumba para rezar y pedir alguna intercesión o favor”.
“Siendo de la comuna de Recoleta y teniendo cerca este Templo, no siempre tuve la oportunidad de asistir. Sabía que era una persona que escuchaba y concedía favores a la gente y a mí me hace eco la figura de él, sobre todo su sencillez, la humildad, que de alguna manera es muy importante para todos nosotros. Valoró su cercanía con los más frágiles y débiles, por lo que me hace también cercano a todo ello”, alabó monseñor Larrondo.
