16 de junio, Nairobi – En el quinto día del CPO se ha concluído el proceso formal de escucha, con un enfoque tanto en el vasto continente de África, como en el enorme país de Brasil.
“África está compuesta por más de 50 países, con muchos idiomas y culturas y, por lo tanto, abarca muchas realidades diferentes”, ha dicho uno de los presentadores, Fray Alfigio Tunha, OFM, Custodio de Zimbabwe. Sucesivamente ha agregado que dos de los problemas que experimenta la Iglesia africana son el sincretismo y una fe que a menudo puede ser faltar en profundidad. “Personas de distintos posiciones sociales profesan su fe en Dios, pero su fe no se muestra evidente en la vida cotidiana”, ha explicado.
Además, Alfigio ha hablado sobre otros desafíos, como la pandemia del VIH y el SIDA, que han llevado a muchas de las iglesias a convertirse en centros de salud. La inestabilidad política, también genera migración a gran escala que ha dado como resultado el desmembramiento de la célula familiar.
En cuanto a Brasil, la vasta región de la Amazonia se ha convertido en el escenario de la cooperación y misión interprovincial. La misión de los frailes en el Amazonas demuestra su opción preferencial por los pobres, a través del ministerio entre los adictos a distintas sustancias, los campesinos sin tierra, las personas abandonadas y los indígenas, entre muchos otros. Los presentadores de Brasil han abordado una amplia gama de cuestiones, incluido el papel de los frailes laicos en la Orden y un aumento del neo-clericalismo, los intentos de los frailes de permanecer cerca de los pobres, incluso cuando dicho compromiso se etiqueta negativamente como socialista, el desafío planteado por los movimientos pentecostales, y la búsqueda de nuevas formas de ministerio en las grandes ciudades de Brasil.
Esto concluye la primera fase del Consejo; la semana próxima verá a los frailes involucrados en el proceso de discernimiento, cuyo objetivo es llegar a un sentir compartido de lo que el Espíritu está diciendo a los frailes hoy.
Fuente: www.ofm.org