Al atrio de la Iglesia de la Recoleta franciscana llegaron centenares de fieles que al mediodía de este domingo recibieron la bendición de ramos de manos del Hno. Adrián Arancibia, quien junto a la comunidad conmemoró la entrada triunfante de Jesús en Jerusalén y la liturgia de la palabra que evoca la Pasión del Señor.
El Hno. Adrián hizo un llamado a vivir intensamente estos días en oración y en cercanía a los hermanos, buscando el rostro del Cristo sufriente. “Es una semana para hacer más oración, para rescatar la Sagrada Escritura, leyendo la Biblia. También es una semana para abrir los ojos y ver en el rostro del hermano al Cristo sufriente, aquel Cristo que hoy tiene hambre, aquel que está sin ropa, aquel que necesita una palabra de acogida, aquel que llega a un nuevo país y que está sufriendo”.
De igual forma recordó que “el gran misterio que estamos celebrando, la pasión, la muerte y la resurrección del Señor, encuentra su sentido en lo que vamos a conmemorar el próximo Sábado Santo por la noche: Cristo está vivo, está resucitado en medio de nosotros. No es que muera de nuevo, pero si se asocia en su muerte y en su cruz, a nuestras muertes de cada día, a cada situación de dolor con la que debemos aprender a convivir”, subrayó.
