A todos los hermanos de la Provincia
En esta solemnidad de la Santísima Trinidad, que el Señor de las misericordias nos anime y motive, a seguir descubriendo en nuestra vida de hermanos y menores, un llamado universal a ser reflejo y testimonio de la vida Trinitaria en nuestra propia vida de fraternidad y servicio.
En este Domingo tan especial para nuestra Provincia, pido a Dios que nos bendiga abundantemente con las gracias que necesitamos para vivir cada día de nuestras vidas la vocación a la que hemos sido llamados, en especial en este tiempo pre-capitular que como fraternidad vivimos.
¡Muchas felicidades a cada uno de ustedes!
Fr. Santiago Andrede,ofm., Ministro Provincial