Con una eucaristía presidida por el Obispo de Valparaíso, monseñor Jorge Vega Velasco, y concelebrada por el Ministro Provincial, Carlos Paz, ofm; además de frailes Franciscanos, sacerdotes del Clero Diocesano y otros miembros del Pueblo de Dios, el sábado 3 de agosto de dedicó el templo y altar de la reconstruida Iglesia San Francisco en Cerro Barón, emblemático templo de la quinta región de nuestro país y parte del patrimonio cultural de los porteños.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
La ceremonia de dedicación de la Iglesia San Francisco en Cerro Barón, comenzó con testimonios de personas que trabajaron en la reconstrucción del lugar. Cabe precisar, que el templo construido en 1846, sufrió graves daños a causa de tres incendios ocurridos en 1983, 2010 y 2013 y actualmente, se consagra a Dios, bajo el patrocinio de su santo Patrono, San Francisco, y se transforma en un signo de esperanza para toda la comunidad eclesial e iglesia local de la ciudad de Valparaíso.
Signos de fe
Milagros Aguirre, arquitecta que estuvo desde el principio en la reconstrucción del templo, esbozó la trascendencia de la obra. “No hablamos de cualquier edificio. Después de nueve o diez años de espera, golpeando puertas por distintas partes, logramos obtener los recursos para poder reconstruir el templo. Esto ha sido realmente un trabajo fuerte y la verdad es que me siento muy contenta y honrada por el logro. Estamos todos muy agradecido del Señor, porque le rogamos para que se pudiera cumplir este milagro”, dijo.
Viviana Álvarez, representante de la comunidad de San Francisco del Cerro Barón, añadió. “Nos hemos sabido unir como comunidad porteña en torno a la Iglesia, cada uno con sus diversidades y diferencias particulares. De esta unión surgió la fuerza y perseverancia por un bien mayor. Pedimos dedicar una vez más estos muros que nos acogen a nuestro patrono y que con la fuerza del Espíritu Santo, esta obra y en esta época una vez más, se vuelva a poner de pie, así como Jesús les enseñó a Francisco desde el crucifijo”, dijo.
A continuación, fue el turno del Ministro Provincial, hermano Carlos Paz, ofm, quien destacó la relevancia de la ceremonia. “Gracias a todos los que han sido parte activa en esta obra que celebramos. Hoy estamos para dedicar, por el ministerio apostólico este templo. Vamos a consagrar el altar, es decir un lugar santo, un lugar para que todos podamos alabar a Dios, y así como San Francisco en la Porciúncula envió a sus hermanos, todos estamos invitados a ser enviados desde este lugar a todas partes. Enviados a anunciar el Reino, anunciar a Jesús, anunciar al Evangelio, anunciar la vida nueva en Jesús”, exhortó.
Patrimonio y fe
En su homilía, monseñor Jorge Vega Velasco relevó que es un día tan especial, “pues es un templo emblemático para nosotros los porteños. Es la primera vez que me toca bendecir o dedicar un templo aquí en la Diócesis y es muy emocionante, sobre todo, porque es un templo emblemático para el puerto y eso le da mucho más sentido a esta ceremonia litúrgica. Se ve lo nuevo, pero queda también lo antiguo”.
Luego, precisó lo emblemático que es este templo Valparaíso. “El templo es un punto de referencia para una comunidad. Es un punto de encuentro entre los miembros, pero, sobre todo, para y con el Señor. Por lo tanto, es una luz que se enciende en este punto de la ciudad. La comunidad sufrió mucho con la serie de eventos que tuvo el templo, fueron tres incendios, pero la comunidad se esforzó para obtener los recursos y poder relevantar el templo. Por eso es emblemático”, manifestó monseñor Vega.
Santos y futuro
Dentro de los variados signos y momentos que tuvo la dedicación del templo, tales como la unción del altar y de los muros, la incensación del altar y de la Iglesia, la iluminación del altar y de la Iglesia, la inauguración de la capilla del Santísimo Sacramento; destacaron la colocación de las reliquias de san Antonio y san Pascual Bailón debajo del altar para significar que el sacrificio de los miembros tiene su origen en el sacrificio de Cristo.
La eucaristía de dedicación del templo San Francisco de Asís, culminó con un compartir fraterno en el Patio Interior del Convento, preparado por la comunidad cristiana de Cerro Barón.