Bendición de pesebres al aire libre en parroquia San Francisco de Asís de Parral

Con ocasión de los 800 años del deseo de San Francisco de celebrar con un pesebre viviente la Navidad del Señor, este domingo 10 de diciembre, la parroquia San Francisco de Asís de Parral, salió a las calles aledañas a sus capillas y sede parroquial, para bendecir los pesebres en sus plazas. El Hermano Julio Campos, ofm, en compañía de agentes pastorales, pudieron acercar la figura de san Francisco a cada una de las personas que participaron de este bello momento.

Por Enrique Astudillo Baeza, periodista

Según nos explica el Hermano Julio Campos, ofm, párroco de San Francisco de Asís de Parral, la Comisión de Navidad propuso para este tiempo una serie de iniciativas pastorales, donde una de ellas, fue generar un espacio de encuentro fraterno entorno a los pesebres de Navidad y la Casa Común. “Bendecirlos, contar su historia y también propiciar pesebres hechos con material reciclado, es un gesto de hacer presente el cuidado de la Creación”, resalta.

En ese contexto, añade que, “motivados por realizar actividades pastorales en clave de misión, esta actividad la hicimos simultáneamente en las tres capillas urbanas y en la sede parroquial, cuya particularidad fue que se realizaron fuera del templo”.

Finalmente, esboza el Hermano Julio que la actividad de este domingo 10 de diciembre, “fue un bello momento de compartir y dialogar entorno a Jesús en Belén y se manifestó gratamente en la recepción de la gente, quienes llegaron muy entusiasmados, pues no sólo llegaron con pesebres, sino que también trajeron sus mascotas y los niños y todos fueron bendecidos”, valoró.

Camino de luz y de fe

María Elena Burgos Gutiérrez, es Animadora de la capilla San Martin de Porres y no cabía en emoción por tan bella actividad. “Como experiencia personal ha sido algo único, maravilloso y novedoso, ya que, a pesar de ser una persona activa dentro de los diferentes servicios de la Iglesia, me considero ignorante sobre el origen del pesebre. Entonces fue muy enriquecedor saber de nuestros orígenes, especialmente de nuestros santos Patronos y ese gran amor que demuestran por el Señor. Además de ser instancia que nos congrega y nos reúne como la gran familia Franciscana que somos y que compartimos con alegría una misma fe y creencia”.

Frente a lo anterior, María Elena cree que para muchos fue un acierto la iniciativa, pues “desconocíamos que San Francisco fue el creador de tan bella recreación que para nosotros los cristianos, es uno de los acontecimientos más importantes a vivir. Además, con este acontecimiento nos viene a mostrar un camino lleno de luz, de esperanza, de fe y que toma más fuerza, al ver que se refleja de esta manera, es decir, renovando el alma y llamando a tomar conciencia sobre cosas mucho más importantes que tenemos que considerar”, destacó.

Encuentro con los hermanos

En el caso de Cristián Sánchez Escobar, del Equipo Coordinación Comunidad Santa Teresa De Los Andes, la actividad fue muy hermosa, donde resalta el importante Tiempo de Adviento que vivimos, “porque vamos preparando nuestro corazón y nuestra vida comunitaria para celebrar el nacimiento del Señor, pero especialmente a través de nuestra espiritualidad Franciscana, donde recordamos este hermoso tiempo de los 800 años del Pesebre de Greccio y como Francisco va haciendo también vida hoy día, a través de los signos de los tiempos”.

En esa línea, Cristián siente que estas actividades, “nos invita también a mirar el Greccio que tenemos en nuestras propias comunidades, haciendo eco de la invitación del Papa con la Sinodalidad, con el mirar hacia las periferias, de encontrarnos con el otro, en el fondo, preguntarnos cómo hemos ido incorporando ese Greccio en medio nuestro, con las nuevas familias, con las nuevas formas de relacionarnos y encontrarnos con la familia. Para nuestra comunidad Santa Teresa de los Andes, que es esta capilla que pertenece a la parroquia San Francisco de Parral, ha sido un encuentro maravilloso con los hermanos”.

Por último, Cristián Sánchez Escobar siente que, a través de este tiempo, han tenido varios signos para celebrar los 800 años del Pesebre. “Llegaron muchas personas de nuestra comunidad, muchos vecinos del sector que de repente no son asiduos para participar de nuestra vida de Iglesia constante o activamente, sin embargo, se incorporaron. Fue un encuentro muy provechoso, de mucha fraternidad, de celebrar la vida, de agradecer este encuentro que el Señor nos ha permitido tener. Esperamos, por supuesto, que, así como hemos logrado motivar a estos hermanos a tener la participación en esta celebración, podamos también seguir al modo de Francisco, anunciando la Buena Noticia a través de los signos de los tiempos en la sociedad en la que nos encontramos, en medio de las periferias, en esta Iglesia en salida”.