Con una procesión por el centro de Santiago y una misa en el Templo San Francisco de la Alameda se desarrolló este sábado 25 de noviembre la Conmemoración del 70° aniversario de la Coronación Pontificia de la Virgen del Socorro, Patrona de la ciudad de Santiago. La eucaristía fue presidida por el cardenal Celestino Aós, Arzobispo saliente de Santiago.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Los festejos por el 70° aniversario comenzaron a las 16:00 horas con una procesión desde el Convento de Santo Domingo, la cual avanzó por calle 21 de Mayo y Estado, para llegar a eso de las 17:00 horas hasta el Templo San Francisco de la Alameda, lugar donde se llevó a cabo la eucaristía.
Cabe consignar que la Virgen del Socorro es la imagen entronizada en el altar mayor del Templo San Francisco de la Alameda, la cual fue traída por Pedro de Valdivia y que permanece hace más de cuatro siglos junto a la Orden Franciscana de Chile.
Fe, respeto y devoción
El Hermano Mauricio Javier Herrera, ofm, párroco del Templo San Francisco de la Alameda, destacó en primer lugar, el respeto y la solemnidad que envolvió toda la celebración. “Debemos resaltar la celebración que los Frailes Dominicos prepararon en su Iglesia. El momento de oración realmente fue muy significativo, muy bien preparado, muy solemne. Justo coincidió con que ellos también están en Capítulo, así que había un gran número de ellos que hicieron esta primera parte. Allí nos esperaba el cardenal también y una vez que terminó la oración preparada por ellos, dimos paso a la procesión que fue muy acompañada”, esbozó.
Asimismo, valoró por parte de los Hermanos Franciscanos el respeto de la gente durante toda la actividad. “Realmente podíamos haber esperado frente a la situación que la Iglesia vive, un poco más de indiferencia o incluso hostilidad, pero, al contrario, vimos muestras de mucho respeto, gente que se detenía para saludar, para persignarse, para hacer un momento incluso de oración, de fotografiar la imagen, realmente muy bonito eso”, precisó.
Con lo anterior, prosiguió. “Creo que, dentro de todas las cosas, el respeto fue muy significativo. Hoy, salir en una procesión o hacer muestra pública de nuestra fe no es fácil, sobre todo frente a las reacciones que puede haber por parte de la gente, pero esto fue todo lo contrario y eso realmente nos dejó muy contentos”, valoró el Hermano Mauricio.
Fue toda esa muestra de cariño y devoción, la que hizo llegar en muy buen pie hasta el Templo San Francisco de la Alameda. “Ya en casa, la santa misa que presidió el cardenal fue muy bonita. Un coro hermoso de la Catedral nos acompañó, al igual que el repique de las campanas que ya desde muy lejos se podía percibir el sonido, entonces todo eso ya llamaba la atención y creó todo un ambiente realmente festivo y de mucho misticismo”, desglosó.
Una gran tarea por delante
En esa línea, el Hermano Mauricio Javier Herrera, ofm, enfatizó la importancia que el cardenal Celestino Aós le otorgó -al momento de su homilía- a la Virgen María. “Resaltó ciertamente la presencia de María en medio de la fe del pueblo, la presencia de los hermanos también Franciscanos con esta responsabilidad, por decirlo así, de ser custodios de esta imagen tan antigua y significativa de la Virgen del Socorro”.
Finalmente, el Hermano Mauricio Javier Herrera, ofm, párroco del Templo San Francisco de la Alameda, señaló que el Arzobispo saliente de Santiago, “nos animó bastante en ese aspecto, es decir, que, bajo esta misma óptica de María, resaltó el sentido de la vida en todas sus dimensiones, es decir, cómo estar llanos a este sentido, a este signo de la vida, cómo protegerla, cómo cuidarla, cómo respetarla”, enumeró al cierre.
Indulgencia Plenaria
Las buenas noticias no terminaron con la santa eucaristía, pues como signo de agradecimiento y devoción, la Penitenciaria Apostólica concedió la Indulgencia Plenaria a todas las personas que participasen de la Conmemoración del 70° aniversario de la Coronación Pontificia de la Virgen del Socorro.