
El primer taller nacional sobre crisis climática -desarrollado de manera online este miércoles 19 de julio- puso el foco en los desafíos que genera esta problemática a nivel parroquial y cómo enfrentar de manera comunitaria los efectos del mal cuidado de la Casa Común. En total, participaron 44 personas desde Iquique hasta Castro, quienes escucharon las diversas experiencias y luego debatieron en un plenario.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Con un exitoso primer taller – enfocado en Catequesis Familiar de Primer y Segundo año, además de un trabajo con adultos mayores- realizado en la parroquia San Buenaventura de Angol, esta vez la idea fue ampliar esta experiencia y tomar conciencia a nivel país respecto de la crisis climática que afecta al planeta, siempre apoyados en la Encíclica Laudato Si que el Papa Francisco puso a disposición de la gente.
De esta manera, y en base a estos dos elementos, la Oficina JPIC comenzó a trabajar dando estos primeros pasos con este taller nacional online y así, tomar conciencia y generar diversas actividades sobre el tema.
Poner en común ideas y desafíos
En esa línea, Patricia Olmedo, quien es miembro de la Oficina JPIC desde hace unos seis años y gestora de este taller online para catequistas, cree que este taller es un gran aporte para todos los participantes. “Nuestra idea era compartir la experiencia para que otros pudieran replicar esta actividad en sus parroquias, comunidades o fraternidades. Yo creo que fue bastante enriquecedora la experiencia, porque la verdad que nosotros hablábamos desde la experiencia y de lo que nosotros habíamos hecho. Cada uno tenía una vivencia distinta y había dado algún pasito para avanzar en el cuidado de la Casa Común”, enfatizó.
Asimismo, el Hermano Nadio Aguilera, ofm, de la Fraternidad San Buenaventura de Angol y miembro de la Oficina JPIC, también percibió un buen espíritu de los participantes, “escuchando con mucha atención, y cuando fue el momento de compartir experiencias, muchos levantaron sus manos y compartieron lo que lo que ellos están haciendo o lo que podrían hacer también en su comunidad y en su parroquia”, analizó.
Respecto de los principales dolores que el Hermano Nadio Aguilera, ofm, pudo observar en los participantes, estuvo la poca conciencia que hay actualmente en las personas en el cuidado de sus espacios. “El descuido que hay en cuanto a los microbasurales, eso fue algo común”, aseveró.
Patricia Olmedo, por su parte, observó los avances en la materia. “Algo en común que pude ver fue que todos estaban haciendo de una u otra manera alguna acción. Eso es enriquecedor, además que, como proyecto,cada uno comenzó a contar un poco su vivencia y concluimos en que podríamos hacer una actividad a nivel nacional, a través de una exposición virtual, y eso yo creo que alienta a seguir haciendo futuros talleres o también haciendo otras actividades”, anheló.
Ser consecuentes con uno mismo
Sobre cómo vivieron este taller y la experiencia personal que les dejó, el Hermano Nadio Aguilera, ofm, sostiene que es un tremendo desafío como Fraternidad el cuidado de la Casa Común. “Cuidar el agua, la luz y otros elementos, uno los cuida no por querer que la cuenta de la luz o del agua llegue menos, sino por una conciencia mucho más profunda”.
Misma impresión posee Patricia Olmedo. “Es una responsabilidad que uno no puede abandonar en este momento. Debemos seguir acompañando, también innovando, viendo otras formas de acercarnos a más personas y lograr este cambio de pensamiento, cambio de estilo de vida, para que no solamente se refleje en que las cuentas sean más baratas, sino que también en el ahorro o el cuidado del agua, de la luz, de no botar basura, de poder dar, como nosotros explicábamos en el taller, los primeros pasos para crear una conciencia ecológica”.
Sin embargo, el Hermano Nadio Aguilera, ofm va más allá con su crudo análisis. “Son aterradores los pronósticos que hay a futuropara nuestro planeta. Entonces, no podemos quedarnos indiferentes. Nadie puede quedarse indiferente frente a este desastre ecológico que hemos producido nosotros mismos”, precisa.
Ocuparse y preocuparse
Por último, el Hermano Nadio Aguilera, ofm, solo pide continuar trabajando de manera mancomunada esta realidad del país y del planeta. “Como su nombre lo dice, Justicia, Paz y Ecología, no tenemos que despreocuparnos de ninguno de estos aspectos. Justicia, preocuparnos también de la justicia, de la justicia entre nosotros los seres humanos, cómo nos tratamos, cómo tratamos a nuestra gente que trabaja a veces con nosotros, cómo nos tratamos entre nosotros cuando trabajamos en grupo y también no descuidar nuestra naturaleza”, clamó.
Finalmente, Patricia Olmedo, invita a un trato justo entre todos. “Nosotros cuando hablamos del cuidado de la Creación, normalmente lo asociamos a medio ambiente, pero la verdad es que se refiere a algo que va más allá, es cuidarnos como personas, a cuidar a nuestro entorno. Hablar de la justicia, eso implica la justicia social, eso implica también el poder tener un trato digno entre todos los que habitamos esta Casa Común, la única Casa Común que tenemos. Se logró el objetivo ytenemos que seguir dando el siguiente paso para poder seguir este caminar juntos, sumar más voluntades, sumar más personas, ya sean católicos, cristianos o no creyentes, pero que vayamos en la misma línea de cuidar la Casa Común”.
