La segunda misa por la pronta beatificación de Fray Andresito de este viernes 14 de julio en el Templo Recoleta Franciscana, fue presidida por el Hermano Juan Rovegno, ofm, Vicepostulador de la causa del Venerable.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
En su homilía, el Hermano Juan Rovegno, ofm, dio gracias a Dios por poner en nuestro país el ejemplo de amor y servicio hacia los más pobres de Fray Andresito. “Damos gracias a Dios por este hombre que nos puso en nuestra historia y que vivió plenamente la Palabra de Dios. Este hermano nuestro que, en una vida completamente creyente, comenzó a experimentar la salvación, experimentarla con un corazón humilde y un corazón abierto a que Dios hiciera de él lo que estimara”.
A continuación, el Hermano Juan prosiguió destacando el ejemplo de fe del Venerable. “Vemos como Fray Andresito se enfrenta a las dificultades, ya sea con su familia, con la vida, la escasez, la epidemia, y donde convencido de su buena relación con Dios, siempre hizo su voluntad y siempre puso en práctica la sabiduría del Evangelio”, destacó.
“También siguió enfrentando un mundo contrario al evangelio y a pesar de ello, siempre quiso hacer la voluntad de Dios en su vida. Confiaba en el Señor y seguía adelante y siempre fiándose de Él. No se cansaba, era incansable”, alabó el Vicepostulador de la causa de Fray Andresito.
En esa línea, el Hermano Juan Rovegno, ofm, también destacó la fuerza y el testimonio de Fray Andresito frente a las adversidades. “A su llegada a Chile se destaca por llevar la Palabra de Dios, porque estaba convencido que el Señor era la salvación y que Jesucristo era su Hijo. Siempre estaba preparado para llevar esta Palabra de Dios a diversos lugares, donde algunos no eran agradables, y por eso muchas veces en las calles se reían de él y sufría (…) en alguna ocasión le dieron una paliza, porque era un hombre que representaba los valores del Evangelio como el amor, la paz, la justicia, la reconciliación, la sencillez”, enfatizó.
Al cierre de su exhortación, y a la luz de lo anterior, el Hermano Juan Rovegno, ofm, precisó que “Fray Andresito veía a este Dios que se hacía presente en medio para contrariar la soberbia y todo aquello que se oponía al plan de Dios. Ese plan de Dios que repercute en todos nosotros como el ser solidarios unos con otros, el estar preocupado de los enfermos, de poder socorrer a aquellos que están en problemas difíciles o circunstancias peligrosas de la vida. Fray Andresito convencido del Evangelio nos invita a ser testimonio de amor al prójimo”, señaló.
Finalmente, el Hermano Juan, destacando todo el servicio de Fray Andresito en su paso por nuestro país, ánimo a los fieles a seguir rezando por su pronta beatificación y a seguir creyendo en todo momento en Dios. “Que el testimonio de Fray Andresito nos haga a todos más valientes para seguir a Jesús y anunciarlo con nuestra vida”, concluyó.
Al igual que todas las misas, los presentes se acercaron hasta la tumba de Fray Andresito para rezar por su pronta beatificación y por aquellas intenciones que pusieron a los pies del Venerable.
