El Vicario de la Zona Centro y también Obispo Auxiliar de Santiago, Monseñor Álvaro Chordi, visitó entre los días 18 y 21 de mayo la parroquia San Francisco de la Alameda. Dentro de sus actividades, se encontró con diferentes comunidades pastorales y, además, presidió eucaristías en compañía del Pueblo fiel de Dios.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Monseñor Álvaro Chordi comenzó su visita pastoral con la eucaristía inicial el jueves 18 de mayo, mientras que el viernes 19, se reunió con el Consejo Pastoral Parroquial, donde se desarrolló un momento de buen compartir y de dialogo con niños, jóvenes y adultos.
La jornada continuó el sábado 20 de mayo, donde junto con compartir con las diversas realidades pastorales de la parroquia, Monseñor Álvaro Chordi presidió la eucaristía de las 19:30 horas, ocasión en que los catequistas renovaron el servicio de anunciar el Evangelio y de acompañar a niños, jóvenes y adultos en su proceso de preparación a los sacramentos.
Por último, grata sorpresa se llevaron los fieles que asisten continuamente a las misas de la parroquia San Francisco de la Alameda, ya que el domingo 21 de mayo, Monseñor Álvaro Chordi, Vicario de la Zona Centro y también Obispo Auxiliar de Santiago, celebró la eucaristía de las 12:00 horas, donde finalizó su visita pastoral.
Visita enriquecedora
Daniela Ponce, catequista de Confirmación juvenil de la parroquia, se manifestó muy contenta con la visita del Vicario. “Fue muy enriquecedora para nuestra comunidad, porque nos permitió compartir individual y comunitariamente nuestra labor pastoral. Nos escuchó, animó y aconsejó respecto de nuestras inquietudes. Destaco su sencillez y cercanía en el compartir y la valoración que dio a nuestra parroquia desde su espiritualidad y servicio, así como el valor patrimonial que poseemos”, dijo.
Agregó que Monseñor Chordi “compartió y se acercó no solo con los agentes pastorales, sino también con los feligreses y se dio el tiempo para conocer los distintos grupos de nuestra parroquia. Para mí su visita fue muy especial y animó mi camino de fe y servicio pastoral”, selló.
Tiempo de gracia
Asimismo, el Hermano Mauricio Javier Herrera, párroco de la Alameda, también expresó su gratitud por la visita del Vicario de la Zona Centro. “Fue un tiempo de gracia para la pastoral, para que pudiéramos compartir con el Obispo y él ver también la realidad de nuestra parroquia. Es una persona muy cercana, muy sencilla y que dio el espacio para poder compartir, para poder dialogar con él. Así que en ese aspecto estamos muy contentos”.
“Ciertamente que habrá desafíos, que habrá que seguir trabajando, que básicamente es el cómo seguir proyectando nuestra presencia en medio de la ciudad, del entorno que está nuestro convento, nuestra parroquia”, rescató el Hermano Mauricio.
Transmisores de la fe
Finalmente, Muriel Torres Lecourt, Coordinadora del Consejo de Pastoral Parroquial y también catequista de niños de segundo año de primera comunión, agradeció la oportunidad de compartir con Monseñor Álvaro Chordi. “Lo vi muy cercano, muy atento y quedamos muy contentos con su visita. Nos dijo que vivimos una espiritualidad muy linda, que tenemos un sello que no debemos perderlo, que sigamos transmitiéndolo. Nos dijo que salgamos a la calle y atraigamos a otros aquí al Convento, a los grupos, para que se inscriban a los sacramentos. En el fondo, que transmitiésemos ese sello y que no lo perdamos”.
Asimismo, Muriel Torres extendió. “Nos dejó el desafío de centrar nuestra vida en Cristo y no perder el foco en la vida comunitaria centrada en Cristo, apostar por los más jóvenes, salir a buscar a los jóvenes, acompañar a los jóvenes, darles cabida a los jóvenes. Cuidar nuestro sello Franciscano, nuestra identidad y rescatar el tema patrimonial. Fue un beneficio para todos, un aire nuevo el respirar esa cercanía con el pastor y motivados para seguir prestando nuestro servicio fraterno, cariñoso”, cerró.
