Apoyados por gran parte de la comunidad para mantener firme esta tradición de muchos años de llevar la santa Comunión y la Unción de los Enfermos, la parroquia San Buenaventura de Angol, celebró este domingo 16 de abril la Fiesta de Cuasimodo. Lo hizo como ya es habitual, asistiendo y acompañando a los más delicados de salud y ancianos de su sector parroquial.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Por cerca de cuatro horas, las calles del sector parroquial de San Buenaventura de Angol se llenaron del espíritu de Dios al ver como desde Las Acequias, pasando por El Retiro y El Cañón, entre otros puntos; caballos, bicicletas y gente a pie, celebraba la Fiesta de Cuasimodo 2023. “Es continuar una tradición que se viene realizando con hermanos hace un tiempo atrás y que ha ido tomando más fuerza. La pandemia paralizó esta celebración, pero siempre han existido las ganas de seguir continuándola”, explica el Hermano Mario Márquez, ofm, párroco de San Buenaventura de Angol.
Asimismo, detalla que este año la Fiesta de Cuasimodo estuvo a cargo del Grupo Patrimonio, quienes ayudan a sostener el mejoramiento del templo y también son quienes se han preocupado de mantener estas tradiciones de Angol y también de la parroquia. “Ellos han sido los más interesados con todo esto”, agradece.
De esta manera, las cuatro horas de camino y visitas, que contó con la participación de huasos y de gente acompañándolos a pie, ayudó a que unas 40 personas cristianas conocidas del sector parroquial pudieran recibir la santa Comunión. “Es una experiencia muy linda. Primera vez que la vivo y fue muy edificadora y también estremecedora, porque uno se encuentra con una piedad de la gente inmensa, con una acogida maravillosa, una espiritualidad, una espera de Dios. Quizás es algo tan pequeño, pero para ellos es algo tan grande. La gente en el camino nos saludaba. Vimos un amor inmenso hacia la Eucaristía”, destaca emocionado el Hermano Mario.
“Uno aquí se encuentra con las realidades de la vida. Muchos ancianos solos, enfermos y postrados. Con mucha gente en cama por mucho tiempo, con dolores, gente verdaderamente sufriendo y también gente que los ayuda y cuida haciendo un verdadero apostolado. Algunos no pudieron comulgar, ya que se estaban alimentando por sondas, por lo tanto, es una experiencia muy estremecedora”, prosigue.
Constatar la realidad tal como es, fue algo que el Hermano Mario Márquez, ofm sintió con mucha profundidad y que le permite reflexionar acerca del futuro. “Son momentos que estremecen el alma y que nos presenta un desafío como Iglesia, también nos presenta interrogantes en cuanto al dolor que vive la gente. Quizás faltó la Pastoral Sacramental, del Dolor, del Acompañamiento. Una pastoral que acompaña verdaderamente a gente postrada, que está sola, gente mayor que vive su día a día con mucha soledad. Sin duda se nos presentan grandes desafíos de cómo atender a esta gente”, exhorta.
Pero no todo es tristeza, ya que también se da el tiempo de agradecer y detalla que, para llegar a esta celebración, hubo un trabajo previo. “Un grupo de jóvenes, especialmente de Comunicaciones, fueron marcando las casas, los espacios, haciendo visitas previas, poniendo las cruces en las casas y los lugares donde estaríamos. Muchos fieles nos acompañaron en el camino cantando a capella. Luego ver a la gente que tenía preparado sus altares fue muy gratificante”, valoró.
En esa línea, el Hermano Mario, también destaca que el Cuasimodo de este año permitió tener un espacio de reencuentros. “Nos tocó visitar agentes pastorales muy antiguos y que son muy significativos para la parroquia, ya que entregaron su vida por el Evangelio por medio de la Catequesis o de la Pastoral. Fue un reencuentro con la realidad pastoral”, precisó.
El paso de Dios por medio de la renovación
Coincidentemente este Segundo Domingo de Pascua, seis ministros de la Parroquia San Buenaventura de Angol renovaron su Ministerio para llevar precisamente la Comunión a los enfermos. “Son personas que han dado su tiempo y su vida por esta misión de asistir a los más enfermos y de ayudar a la Pastoral del Dolor”, sostuvo el Hermano Mario.
En esa línea, también ve los frutos que el Señor pone a la parroquia. “Gracias a Dios se ha ido haciendo un caminar nuevo con nuevos ministros laicos, quienes irán acompañando a estas personas en sus casas llevando la Comunión y la Unción. Dios mediante, a estos seis ministros que renovaron, se sumarían otro seis, que son matrimonios”, augura.
La Fiesta de Cuasimodo en la Parroquia San Buenaventura de Angol, terminó con la celebración de la Santa eucaristía a las 19:00 horas en el templo parroquial y en compañía del Pueblo de Dios.