Rescatando todas sus costumbres arraigadas de siglos en Salamanca -como son su religión, su cultura y sus tradiciones- la parroquia de Nuestra Señora del Rosario se prepara con todo para esta Semana Santa 2023. Con un trabajo unificado junto al municipio y otras entidades, las liturgias propias de la Iglesia y la fuerza de la religiosidad popular, el Triduo Pascual se convierte en un momento trascendental para reforzar las costumbres de la zona. Destaca el descendimiento de una imagen articulada de Cristo Crucificado por parte de los Nazarenos o más conocidos en la cultura local como Cucuruchos.
Por Enrique Astudillo Baeza, periodista
Lo primero que consigna Gonzalo Vásquez Mondaca, miembro del equipo de Pastoral Parroquial de Nuestra Señora del Rosario de Salamanca, es que las principales celebraciones – como el caso de las procesiones- se realizarán al aire libre para evitar las aglomeraciones con los resguardos pertinentes.
Luego, añade que parte de los signos que entrega la Semana Santa a los habitantes de Salamanca, se debe a un fiel y colaborador trabajo entre diferentes áreas. “En primer lugar está el municipio local, quienes se han propuesto rescatar las tradiciones que la caracterizan y hacen única en nuestro país, brindando el apoyo económico y logístico para el buen desarrollo de las diferente actividades”, explica.
Asimismo, se suma la participación del Club de Rodeo de Salamanca con su tradicional “Cabalgata de los Peregrinos”, “que son huasos que transportan la imagen de la Dolorosa y la llevan desde su recinto hasta la parroquia el Viernes Santo y la hacen entrega de manera muy respetuosa y de mucha emoción para ellos, que se fomenta con la religiosidad popular propia del lugar”, agrega Gonzalo Vásquez.
Viernes Santo particular
Sin duda uno los aspectos de mayor relevancia que posee Semana Santa en Salamanca tienen que ver lo que sucede en Viernes Santo. Junto a las liturgias propias de la Iglesia, acá se desarrolla un particular signo que es el descendimiento de una imagen articulada de Cristo Crucificado. El cual es desclavado de la cruz por los Nazarenos -o más conocidos en la cultura local como Cucuruchos– que son personajes Promeseros y lo hacen de manera anónima. Allí, en dicha ceremonia, el sacerdote va reflexionando sobre el sentido del desclavamiento de la imagen de Cristo, comenzando por sacar el letrero INRI, después la Corona de Espinas, luego los brazos y pies, hasta sacar el cuerpo, el cual es presentado a su Madre María, para luego ser depositado en una urna descubierta que se lleva en procesión a los pies de un cerro aledaño y recrea el Santo Sepulcro.
Este último espacio, queda acompañado por los peregrinos, quienes aprovechan la ocasión para reflexionar sobre la Muerte de Jesús. Luego, se continúa en procesión hasta el Templo y se hace el Sermón de la Soledad de María, posteriormente, se sube nuevamente en procesión a buscar el cuerpo de Jesús para ser trasladado al Templo. “La procesión va acompañada por Cofradías con imágenes y que la preside la Cruz desnuda de Jerusalén, también un grupo de Pregoneras que proclaman las Bienaventuranzas, la imagen del Niño Dios que la transportan niños y niñas de Catequesis, le sigue la imagen de Verónica, María Magdalena, San Juan, la Mater Dolorosa, y el Cristo Yacente que lo transportan hombres que se denominan la Hermandad de Cargadores del Cristo Yacente y los peregrinos acompañan portando faroles”, describe Gonzalo Vásquez.
Para Gonzalo Vásquez Mondaca, todos estos signos hacen muy particular la celebración de Semana Santa en Salamanca, y – manifiesta- que lo transforman en un hito importante y con una gran afluencia de público en todos sus días. Además, enumera otras actividades de relevancia y que permiten que asistan personas de distintos lugares de nuestro país.
Así, está el Rodeo de Inter asociaciones, al cual asisten corredores de diferentes lugares de nuestro país. También está el comercio con largas cuadras llenas de negocios de diversa índole y que se convierte en una ocasión para que los asistentes puedan visitarla y comprar. Por su parte, el municipio también desarrolla otras actividades de promoción de la ciudad con ferias de muestras locales y actividades culturales, “por tal razón, se hacen los preparativos en conjunto, para no entorpecer lo esencial y de lo que significa para el mundo cristiano lo que acontece con Jesús a quien recordamos en estas fechas”, advierte Gonzalo Vásquez.
“Estamos insertos en este trabajo con un gran equipo de la parroquia, donde cada uno hace su aporte para que cada actividad en la liturgia y en la religiosidad popular salga lo mejor posible. Hay mucho trabajo, que a veces se nota en el cansancio, pero que la satisfacción es ver a la gente que se regresa contenta y con un buen recuerdo de la visita a nuestra comuna”, anima e invita Gonzalo Vásquez Mondaca, miembro del equipo de Pastoral Parroquial de Nuestra Señora del Rosario de Salamanca.
Un momento único e inigualable
En el caso de Mario Jorquera, Secretario Parroquial de Nuestra Señora del Rosario, vivir la Semana Santa en Salamanca es una experiencia única en Chile. “En esta zona alta del Choapa se fusionan la fe, la cultura y las tradiciones, todo esto en un ambiente de respeto y sana convivencia. Al caer la noche en Viernes Santo, las Cofradías y hermandades que se hacen presente para el Descendimiento de Jesús y luego acompañan en la multitudinaria procesión del Santo Entierro (con miles de fieles) hasta el Santo Sepulcro, hacen de esta noche una de las más emocionantes del año, el contemplar los rostros de mujeres y hombres, niños y jóvenes, nos hace reflexionar que después de siglos y siglos, no somos indiferentes ante el dolor”, narra.
Finalmente, sobre lo anterior, extiende. “Esta noche santa, en que acuden peregrinos de todos los valles de Salamanca, también de otros lugares de Chile y de tierras muy lejanas, se recordará que, por unas horas, un rincón de la Región de Coquimbo se convirtió en un auténtico pueblo andaluz”, añora.