
“Sabemos que la humanidad mató a Jesús, al Dios con nosotros, en la cruz. Una muerte muy cruel y dolorosa. Sin embargo, el espíritu de Dios interviene para vencer a la muerte y darle vida plena y resucitada a Jesús. Este hecho de fe, esta acción de Dios, hoy sigue presente y viva en cada uno de nosotros para vencer tantos signos de muerte que en la actualidad también reflejan la muerte de Jesús.»
“No obstante, tantos dolores se unen al dolor de Jesús en la cruz y por la acción de Dios y nuestro compromiso solidario creemos que la resurrección posible y real en Cristo hoy también se hace presente dando vida, belleza, justicia, paz, fraternidad, alegría, misericordia desde nuestro corazón y nuestra vida hacia los demás”.
Con estos sentimientos, el hno. Domingo Tapia, celebró junto con los hermanos Franciscanos de La Cisterna, la pascua del Señor