
Con el Domingo de Ramos, se le da término a la Cuaresma, y comienza la Semana Santa. En esta celebración se recuerda la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén en medio de una multitud que lo aclamó como el Mesías.
Es por ello, que acostumbramos en este día presenciar la bendición de las palmas, la procesión, la Misa y la lectura del relato de la Pasión durante la Eucaristía.
Cientos de fieles fueron los que participaron en las distintas comunidades de nuestra Diócesis, los cuales con sus ramos de palmas, alabaron y glorificaron al Señor.
El Hno. Alejandro Ubeda, párroco de san Francisco de Antofagasta, nos invita a vivir esta Semana Santa, con una profunda fe en nuestros hogares y comunidades. “Estos días, debemos contemplar el amor del señor, este Dios que nos ha amado hasta el extremo de morir por nosotros en la cruz. Es querer mirar al Señor con ojos agradecidos y admirados de lo que el amor y misericordia de Dios, es capaz de ser hacer por nosotros. Vivamos esta semana en familia, y aprendamos de María que acompañó a su hijo hasta el último momento, sin descuidar a quienes estaban a su alrededor. Para eso necesitamos como la virgen, creer, esperar y saber mirar y admirar confiadamente el amor de Jesucristo nuestro señor”.