Experiencia Letrán: El encuentro de Francisco de Asís con Francisco de Roma

Fue una experiencia maravillosa, un momento para encontrarse con San Francisco y el Papa Francisco, dentro de un contexto de jóvenes, y con la espiritualidad franciscana como eje de la experiencia, más específicamente inspirado en el encuentro de San Francisco  y el Papa Inocencio III en la Basílica de Letrán. Que mejor analogía la que vivió el Santo de Asís y la de nosotros, un grupo de jóvenes que se prepara para encontrarse con el Papa Francisco en el Templo Votivo de Maipú.

La experiencia contaba de dos días, el martes 16 en la tarde donde vivimos la bienvenida, momentos de reflexión, y un espacio de fiesta y compartir; y el miércoles 17 todo el día, con momentos de oración, compartir, finalizando con el encuentro en Maipú.

El primer momento consistió en dar la bienvenida a los jóvenes participantes junto a la explicación de la Experiencia Letrán por parte de los frailes, ilustrando el significado y el sentido de lo que íbamos a vivir; en un segundo momento se realizaron actividades para conocernos e interactuar a través de dinámicas y juegos lúdicos, y así romper el hielo con risas y alegría; en un tercer momento se oró separado en tres etapas, en donde el objetivo era dejar nuestras preocupaciones y las cosas que nos inquietan, en una segunda etapa a través de métodos de relajación se nos invitó a desconectarnos del mundo exterior y poder entrar en contacto con lo divino, con Cristo, esto nos sirvió para poder enfrentar  de mejor manera la experiencia, ya que uno en el día a día  no tiene posibilidad de hacerlo. En una tercera etapa se verbalizo y expreso lo sentido, conectándonos mediante todo el cuerpo con Dios. Finalmente, prolongamos esta oración contemplativa, a través del arte, el teatro y la música. Se nos invitó a elegir una instancia orante para participar. Y terminamos el día haciendo fiesta con todos los jóvenes y frailes presentes, fue un momento para conocer a otras personas de distintas realidades.

El día miércoles nos levantamos temprano para vivir la oración de la mañana, que la realizamos en fraternidad en el templo. En ese momento se nos dió una presentación sobre el acontecimientos vivido por Francisco de Asís en la basílica de Letrán, de manera de poder entender y comprender, lo que estábamos viviendo.. Así nos fuimos al desayuno a compartir los alimentos fraternidad. Luego, tuvimos una exposición de un experto, donde analizamos los textos de la biografía de San Francisco “Vida Primera, Tomas de Celano”, donde pudimos encontrarnos con el texto de San Francisco en Letrán y ver los misterios que se nos revelaban ante nuestros ojos entendiendo y comprendiendo lo que nos decía el texto sobre la vida, actos y personalidad de Francisco.

En la tarde, nos dirigimos al encuentro con el Papa Francisco en el Templo Votivo de Maipú con los jóvenes, en comunidad comenzó nuestro viaje para cruzar Santiago y vivir este momento único. Al llegar me motivó la alegría que se respiraba en el ambiente, animadores en el escenario, oraciones y cantos, a pesar del calor que caía sobre nuestras cabezas a medio día, sabíamos que había un larga espera y que el sol sería nuestro compañero, pero nada nos quitaba la motivación. Nos colocamos lo más cerca que podíamos, para tener las mejor visión. Esperamos con grandes expectativas sabiendo que estos momentos se viven una sola vez en la vida. La espera fue dura, pero cuando llegó el Papa sentimos que estábamos todos conectados como un solo cuerpo, en un solo grito: “Esta es, la juventud del Papa”, la emoción se desbordaba en el ambiente, lo buscábamos en la multitud, por donde iba a entrar, por donde llegaría, estábamos ansiosos, hasta que llegó el momento, y por suerte nuestra entró por enfrente de nosotros, lo vimos de cerca, sentíamos que cuando saludaba a la multitud, en realidad nos saludaba a cada uno de nosotros de manera personal.

El discurso fue preciso, dirigidos a los jóvenes, con la palabra y ejemplos cercanos a nosotros para poder entender su mensaje, con palabras simples pero con un contenido inmenso, fueron palabras sinceras y directas a nuestros corazones. Por eso, lo que personalmente más me llego fue el ejemplo de estar conectado con Cristo a través de la contraseña, con sus propias palabras nos dijo:

“Si no usan la contraseña se van a olvidar. Cárguenla en el corazón. Repítanla y úsenla ‘¿Qué haría Cristo en mi lugar?’. La usarán todos los días, y llegará el momento en el que se la van a saber de memoria, y llegará el día en que, sin darse cuenta, el corazón de cada uno de ustedes latirá como el de Jesús.” Papa Francisco, Maipú, 17/01/18.

Esa última frase fue directa a mí corazón, saltó de alegría al escuchar estas palabras, con solo la idea de que nuestro corazón latirá como el de Jesús. Esto es algo que mi alma anhela, es donde nosotros centramos nuestra esperanza, es nuestro ideal a seguir. Por lo mismo, es primordial que los que nos dijo el Papa no se nos olvide y quede grabado en nuestro corazón, así esas palabras van a ser vivas y podremos llevarlas a nuestros hogares, lugares de trabajo, estudios, en definitiva a toda nuestra vida.

Fue una experiencia maravillosa, que quedará guardada en nuestros corazones por mucho tiempo, y así poder ser verdaderos testigos de Cristo, como ese hombre que un día lo siguió, caminó, vivió, y se convirtió en Papa y ahora nos inspira a seguir a Jesús, como lo hizo Francisco de Asís.

Gracias por la experiencia,

Pablo González Cornejo.