Fr. Andresito es declarado Venerable Siervo de Dios.

El día 8 de julio de 2016, el Santo Padre Francisco ha recibido en audiencia privada a Su Eminencia Reverendísima el Señor Cardenal Angelo Amato, S.D.B., Prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos. En el curso de la audiencia el Santo Padre ha autorizado a la Congregación para promulgar los decretos correspondientes a:

Las virtudes heroicas del Siervo de Dios Giacomo Viale, sacerdote profeso de la Orden de los Frailes Menores, nacido en Airole (Italia), el 28 de febrero de 1830 y muerto en Bordighera el 16 de abril de 1912;

y las virtudes heroicas del Siervo de Dios Andrés Filomeno García Acosta, laico profeso de la Orden de los Frailes Menores, nacido en Ampuyenta, en la isla de Fuerteventura (Islas Canarias), el 10 de enero de 1800, y muerto en Santiago de Chile el 14 de enero de 1853.

Fray Andrés Filomeno García Acosta conocido como ‘Andresito”, nació en la isla de Fuerteventura (Islas Canarias) en el 1800. A sus 32 años, por motivos de pobreza en su tierra, emigró en Uruguay, allí sintió el llamado a la vocación de donarse al Señor. En 1834 en el convento de San Bernardino de Montevideo fue recibido en la Orden de los Frailes Menores como un ‘hermano donado’. Inmediatamente después de la clausura de los conventos, por causa de las leyes subversivas contra la Iglesia en Uruguay, en 1838 junto con otros religiosos se trasladó en Chile. En el convento de la Recoleta Franciscana en Santiago, Andresito se santificó en el humilde servicio de mendigo o limosnero, tarea que ejercitó con exquisita caridad y que le permitió cumplir una auténtica y capilar obra de evangelización. Sostenido de una intensa vida de oración, practicó con alegría las obras de misericordia, llevando alivio donde quiera que hubiera un sufrimiento espiritual o material. Amado del pueblo y rodeado de una enorme fama de santidad murió en Santiago el 14 de enero de 1853. Su causa de beatificación se inició en el año de 1894.