Jóvenes de diversas ciudades del país se reunieron desde el 18 al 21 de Febrero en la ciudad de Angol, para celebrar los 40 años de vida del movimiento Juventud Franciscana en Chile (JuFra). Los jóvenes estuvieron acompañados durante estos días por hermanos de la Orden Franciscana Seglar (OFS) provenientes de distintos puntos del país, por los frailes (OFM) y por exjufristas, que no se quisieron restar de esta importante celebración.
Durante estos días de encuentro los jóvenes tuvieron la oportunidad de conocer un poco más sobre el nacimiento y desarrollo del movimiento, especialmente gracias a los testimonios y mensajes de ex jufristas y hermanos OFM.
Además, pudieron reflexionar sobre los que es ser jóvenes católicos franciscanos hoy en día y sobre el pilar que debiera guiar el caminar de las fraternidades, de la mano del lema del encuentro: “Yo sigo a Cristo, y tú ¿a quién sigues?”.
De manera especial, respondiendo a las problemáticas actuales, se abordó como tema el cuidado de la creación, desde la vivencia de San Francisco y la encíclica “Laudato Sii”.
Sumado a todo esto, los asistentes del encuentro tuvieron la posibilidad de disfrutar de la vida en fraternidad, compartir vivencias, recargar energías para el año que se viene y recorrer la ciudad de Angol.
El día Domingo 21 febrero finalizó el encuentro con la Eucaristía a las 12 hrs, presidida por el Hno Fernando Candia, en la Parroquia San Buenaventura, en la cual se dio gracias por el llamado a ser jóvenes franciscanos. Por lo mismo, en dicha celebración eucarística, el Hno. Luis Cisternas, asistente espiritual, les invitó a renovar su compromiso delante del Señor, ya que es a él a quien siguen los jóvenes franciscanos. “Este fin de semana han vivido lo que contemplamos en el evangelio de este domingo: la transfiguración del Señor. Han experimentado al Señor glorioso por medio del encuentro con los hermanos, en la conversación profunda, en la intimidad de la oración, en la historia del movimiento y en la fiesta que hemos celebrado… ahora deben volver a sus hogares, deben bajar del monte, pero con la convicción de que no van solos. Cuando vuelva el cansancio y el tedio, recuerden este fin de semana” Con estas palabras el hno. Asistente espiritual animó a los jóvenes a continuar a siguiendo a Cristo.